Las y los trabajadores de Starbucks de todo Chile están en huelga. Se acabaron las sonrisas que les impuso el marketing emocional de la compañía multinacional. Por esta razón, y bajo una estrategia superadora del sindicalismo corporativo, las y los jóvenes convocaron a una marcha en Santiago, desde el Centro Cultural Gabriela Mistral hasta La Moneda, este lunes 17 de marzo, a las 18.00 horas, contra la precarización laboral. Bajo la consigna «Si gana la huelga de Starbucks ganamos todos», se llamó a todos los sindicatos, organizaciones de DDHH, estudiantiles, palestinas y de mujeres a hacerse parte de esta lucha.
Desde el pasado viernes 7 de marzo se encuentran paralizados más de 1200 trabajadores y trabajadoras a nivel, en su gran mayoría jóvenes y mujeres.
Enfrentan a una empresa intransigente, que los mantiene precarizados, donde una hora laboral es menor en costo que el café más barato. La empresa ha sido denunciada también por su apoyo al genocidio que comete el Estado de Israel contra el pueblo palestino.
Se pide a organizaciones, individuos, dirigentes, referentes, etc., que puedan firmar el siguiente link en apoyo:
https://docs.google.com/forms/
Este miércoles 12 de marzo, se realizó una asamblea abierta en solidaridad (sede de la CUT en Santiago y modalidad online también).
“Por primera vez en los 15 años de sindicato, estamos pudiendo conseguir un proceso de negociación colectiva real. La huelga es un peligro objetivo para la empresa”, manifestó Antonio Páez, dirigente nacional de los empleados, y añadió que “Finalmente se pone en cuestión quién produce las ganancias dentro de Starbucks, si es el negocio del café carito o somos los trabajadores”, recalcó.
El dirigente sindical precisó respecto de los salarios que “Cobramos menos, el valor de la hora, que el café más barato que se vende en Starbucks”, y agregó que «el café más barato, el expreso, cuesta entre $3.200 y $3.700. Mientras que la hora de trabajo, la empresa la paga a $1.800».
Los representantes laborales exigieron a la multinacional que se aumente la cifra de pago por hora, al menos a $3.700: «Es un monto para vencer la brecha de la pobreza, más que nada».
Augusto, trabajador y estudiante de Derecho señaló que, «cuandó llegué a trabajar acá se me dijo que todos íbamos a ser una gran familia con el mismo objetivo. Pero lamentablemente, con el paso del tiempo, nos dimos cuenta de que esta es una empresa a la que sólo le importa la ganancia. Nos venden un cuento donde nosotros vamos a poder flexibilizar nuestro trabajo con nuestros estudios, pero te piden hacer horas extras porque no tienen personal en las tiendas».
En Starbucks el café más barato que venden es el doble de lo que cancelan por hora a quienes lo preparan, la mayoría jóvenes que buscan cómo pagar sus estudios.
La trabajadora Romané Belmar indicó que, «es desesperante ver cómo te agregan y agregan labores y nos siguen pagando lo mismo».
El presidente del Sindicato de Starbucks, Antonio Páez, explicó que «el negocio de la empresa no es tanto vender café, sino que es vender café a bajo costo. Pero no a bajo costo de los clientes, sino que al bajo costo de la mano de obra. Y esto se ve reflejado en que hoy un café de Starbucks vale casi el doble de una hora de trabajo. Y destrás de esa hora de trabajo barata se esconde una realidad humana muy compleja de abordar. Uno cuando viene a Starbucks la empresa vende lujo, estatus, la idea de que aquí somos todos iguales y eso no es verdad».
Por su parte, el dirigente sindical Camilo Trejo, junto con denunciar el hostigamiento de la firma, puntualizó que «durante la huelga hemos recibido mucho apoyo de organizaciones nacionales e internacionales. La precarización laboral juvenil no se vive sólo en Chile, sino que también en el extranjero».