Un derrame de líquido potencialmente tóxico para el ecosistema y la salud humana, fue registrado la semana pasada desde el ducto del Complejo Forestal Industrial Nueva Aldea de Celulosa Arauco (grupo Angelini) en el sector Magdalena de la comuna de Ránquil.
El trazado del ducto lleva los Residuos Industriales Líquidos (RILES) desde la planta hacia el mar, a través de un emisario submarino ubicado frente a la costa de Mela, en la comuna de Treguaco.
Por este evento, la seremi de Salud del Ñuble inició un sumario contra Celulosa Arauco, con cinco días hábiles para responder con respecto al tratamiento, al manejo y a la afectación del suelo, napas, fuentes de agua y descargas.
El seremi subrogante, Erick Jiménez, indicó que, «la empresa informó la paralización de las descargas a través del ducto en cuestión, por lo que hemos solicitado un informe detallado del evento, incluyendo análisis de agua y suelo e identificación de fuentes de abastecimiento de agua de vecinos cercanos».
Desde su puesta en marcha en 2008, el ducto de la celulosa Nueva Aldea ha presentado una serie de fallas y roturas que han desencadenado derrames.
Las poblaciones de Ránquil y Trehuaco han denunciado ser afectados por los líquidos industriales vertidos al agua, en 2011, 2013 y 2015. Otros derrames ocurrieron en noviembre y diciembre de 2017.
Las descargas de una planta de pulpa de celulosa y papel contienen sólidos, nutrientes y materia orgánica disuelta, como lignina. También puede contener alcoholes, agentes quelantes (sustancias que forman complejos con iones de metales pesados) y materiales inorgánicos como cloratos y compuestos metálicos.