El pasado 10 de noviembre de 2023, en el seno de la Federación de Trabajadoras y Trabajadores de la CCU, nació el Sindicato Nacional de Trabajadores Heineken-CCU, resultado de la unidad de tres organizaciones sindicales, hecho histórico cuyo horizonte estratégico es la negociación por rama o sector económico que ponga fin a las débiles fuerzas con que llegan los empleados a la negociación colectiva por empresa, e incluso que caen en el absurdo de la negociación diferenciada según los eslabones económicos y productivos de la misma compañía.
Mediante un proceso a contrapelo de la tendencia a la fragmentación de las organizaciones de las y los trabajadores, tres sindicatos afiliados a la Federación de Trabajadores de la CCU lograron fusionarse en una sola agrupación, superando virtuosamente sus sindicatos precedentes.
Uno de los dirigentes protagonistas de la iniciativa es Ricardo Camus, quien se desempeña como vendedor de la compañía CCU en Viña del Mar. «Desde hace más de una década que los sindicatos iniciaron el camino de la fusión, haciendo coincidir los contratos colectivos y sincronizando las fechas de las negociaciones colectivas», relató Camus y agregó que, «fue un larga lucha contra la atomización de los sindicatos promovida por la empresa, y una larga lucha para que los propios dirigentes y socios de nuestras organizaciones llegaran a tomar consciencia de que la expresión tan extendida ‘la unión hace la fuerza’, no se trata de un principio para hacer discursos sino que es el modo concreto en que las relaciones de fuerza entre capital y trabajo acortan sus brutales distancias para bien de los asalariados».
– ¿Cómo fue la participación de las y los socios en el proceso?
«Estratégica, por supuesto. Y para comprender mejor la madurez político sindical de los asociados es preciso constatar que en Chile las fusiones entre organizaciones son sumamente extrañas. La lógica del sistema capitalista neoliberal impone la atomización de los trabajadores, nunca su unidad.
Los trabajadores se condujeron con la mirada puesta en el bienestar de las nuevas generaciones laborales.»
– En términos jurídicos, ¿cómo es el tránsito hacia las fusiones sindicales?
«Son situaciones anormales, de acuerdo a los propios funcionarios de las inspecciones del trabajo. De hecho, no existen normativas que vuelvan más expeditas las fusiones y, en consecuencia, su derrotero es mucho más burocrático. Hay muchos resquicios reglamentarios que llenan de tramitaciones la unidad sindical. Al respecto, el marco jurídico está hecho para facilitar la creación de sindicatos pequeños y no lo contrario.»
– ¿Qué trabajadores constituyen el nuevo sindicato?
«Asistentes de actividades especiales y servicios técnicos, vendedores, jefes de ventas, administrativos, etc.»
– ¿Qué ocurre a nivel de las directivas sindicales en los casos de fusión?
«Para crear la unidad de los sindicatos, varios dirigentes, generosamente, dieron un paso al costado. De 9 dirigentes se pasó a 7. Existe una representación zonal en este sentido, de Coquimbo, Viña del Mar, Santiago, San Fernando, Rancagua y Talcahuano.»
Por su parte, el dirigente de la novísima organización laboral, Estanislao Peralta, explicó que la fusión se dio entre los sindicatos de Concepción, Rancagua-Viña del Mar y Santiago-Coquimbo. «De esta manera, se convirtió en el sindicato de ventas más grande la compañía CCU. Además, producto de la propagación del origen de esta nueva organización, los trabajadores que están ingresando recién a la empresa optan por asociarse al nuevo sindicato», señaló Peralta.
El dirigente Estanislao Peralta precisó que el proceso de fusión «arrancó primero a nivel de directivas sindicales e inmediatamente se socializó entre las bases, quienes participaron con entusiasmo y protagonismo», y agregó que, «recibimos un fuerte respaldo de los directivos nacionales y ejecutivos de nuestra Federación».
«Fue muy rico el proceso de consulta respecto del proyecto de fusión en nuestro recorrido por los distintos lugares del país. Además de cumplir el objetivo, los viajes nos permitieron conocernos con asociados a la Federación que sólo sabíamos de nombre o por alguna referencia ocasional», expresó Peralta.
– ¿Qué beneficios comporta la fusión para los trabajadores?
«Mira, en medio del andar del proceso de unidad, nos percatamos que la empresa tiene a los sindicatos con distintos contratos colectivos. Por tanto, tomamos lo mejor de cada contrato colectivo para unificarlo de manera que funcione el principio de ‘a igual trabajo, iguales salarios, beneficios y condiciones laborales’, y con el propósito de emparejar a nuestros compañeros hacia arriba. Y lo otro, es que si somos más asociados en un sindicato único, pues tenemos más fuerza a la hora de negociar. Ello también provoca una potente disposición anímica en los empleados y apunta a la reivindicación general de los trabajadores de Chile: la negociación por rama.»
El Presidente de la Federación de Trabajadoras y Trabajadores de la CCU, Rodrigo Oyarzún, manifestó que, «esta fusión se enmarca en una labor que veníamos formulando hace varios años, donde el propósito inmediato es construir la unidad de los sindicatos para enfrentar en mejores condiciones de fuerza las negociaciones colectivas. Si bien, no es la primera fusión que realizamos, hemos sido consecuentes con los buenos resultados que de esas experiencias previas hemos obtenido, y ahora damos un paso más».
Rodrigo Oyarzún evaluó que, «los dirigentes sindicales han estado a la altura de la complejidad del proceso; de lo que significa organizar sindicatos mucho más grandes y cubrir territorios mucho más extensos» y agregó que «lo que hacemos tiene que ver con el principio elemental de la clase trabajadora de fortalecer sus organizaciones. Mientras en las últimas décadas hemos sufrido una balcanización de los sindicatos, nosotros, a contracorriente, intentamos con toda nuestras fuerzas unificarlos».
Oyarzún recordó que, «en la práctica, los sindicatos que ahora se han fusionado formalmente, ya habían negociado juntos a mediados del 2023», y añadió que «desde una perspectiva que va más allá de la Federación de Trabajadores de la CCU, nuestros pasos están contextualizados de acuerdo a la finalidad del conjunto del mundo del trabajo de conquistar la negociación ramal, por sector económico y rubros específicos».
El máximo dirigente de la multisindical de la CCU relevó «la participación activa de los socios, mediante asambleas, en cada una de las localidades en las que tenemos representación organizativa. Allí se efectuaron encuentros explicativos, informativos, formativos y se votó abrumadoramente a favor de la creación de un sindicato único. Esa tarea se hizo de una manera muy aterrizada, en el sentido de que la fusión por sí sola no es la solución para todos los problemas que nos aquejan».
– ¿Qué fuerzas e intereses podrían estar en contra de los procesos de fusión sindical?
«La patronal normalmente observa este tipo de procesos como un peligro. Al respecto, nuestra posición siempre ha sido de diálogo y de llegada a acuerdos.»