Recadero Gálvez, investigador de la Fundación SOL, fue entrevistado por la Radio Universidad de Chile sobre la llamada «reforma de pensiones» que ya se encuentra en sus últimos trámites en el Congreso.
Gálvez señaló que, «estamos frente a un debate tramposo que está centrado a un mínimo porcentaje adicional de las cotizaciones que continúa yendo al beneficio de las AFP, o que, como ha planteado el gobierno, el 6 % más que se pagará tendrá una composición distinta a la lógica de los últimos 40 años. Y ocurre que, mientras están concentrados en una discusión irrelevante, se dejó de debatir sobre seguridad social, » y agregó que, «el objetivo original que esperaba la ciudadanía era contar con un sistema de seguridad social que les permitiera tener algún tipo de garantía de las pensiones que van a recibir, una garantía de acuerdo a otros estándares que como sociedad nos hemos fijado: salir de la línea de la pobreza y que, al menos, las pensiones lleguen al salario mínimo».
El especialista de Fundación SOL planteó: «¿Por qué permitir que personas que han trabajado toda su vida tengan una pensión menor al salario mínimo? La Pensión Garantizada Universal (PGU), que es el monto que subvenciona el gobierno a las pensiones y funciona como oxigenador artificial del sistema actual, está por debajo de la línea de la pobreza. Muchos sectores no quieren tocar a las AFP, toda vez que está probado que ellas han sido un fracaso desastroso. De hecho, de persistir la estructura AFP, las futuras pensiones seguirán estando bajo los mismos estándares establecidos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT)», y añadió que, «No hay que olvidar que detrás de las AFP existen grandes conglomerados económicos asociados a compañías de seguros internacionales. Mantener las AFP es fortalecer a los dueños del sistema financiero».