El 7 de marzo recién pasado, se quitó la vida la profesora de inglés, activista feminista y de la causa palestina, Katherine Yoma. Sufrió permanente abuso laboral por parte del equipo directivo de su establecimiento y de la CMDS (Corporación Municipal, organismo que dirige la educación pública municipal en la ciudad de Antofagasta), fue hostigada y perseguida por denunciar su situación, luego fue removida de su escuela con una disminución considerable de horas y del salario, castigada con descuentos remuneracionales en el proceso, sin contar con contención ni medidas para la buena convivencia escolar, incluso cuando fue agredida físicamente. Ella dejó testimonio en una carta pública escrita en septiembre del 2023, donde describe los hechos que viven miles de docentes, una realidad recurrente de trabajadores de la educación, estudiantes y apoderados que denuncian irregularidades, que se ven obligados a callar o ser parte de los innumerables abusos.
El caso de Kathy ha provocado una conmoción pública, y ha despertado las simpatías de numerosos sectores de la población, a la vez que una creciente indignación contra las autoridades, en particular el Alcalde y sus equipos de la CDMS.
Desde la Universidad de Antofagasta los estudiantes resolvieron en un pleno (por 32 carreras a favor, cero en contra y 2 abstenciones) la paralización y movilización este 25M junto a docentes. Desde la UCN (Universidad Católica del Norte) también se convocó a unirse a la movilización del 25M. Desde el LEA (Liceo Experimental Artístico, particular subvencionado) se convocó a movilizarse también para el 25M, así como otras comunidades educativas particular subvencionadas han declarado su apoyo, como los trabajadores del San Agustín, Corazón de María. Por otra parte, las trabajadoras de Fundación Integra se sumarán al paro y movilización. Apoderados de diversos sectores también convocan a marchar en unidad.
Desde diversos sectores del régimen, políticos burgueses, directivos y burocracias están buscando activamente desactivar la lucha e impedir un nuevo salto en ella. O sea, están jugándose a dividirnos, no solo al interior del movimiento docente, sino dividir a docentes de apoderados, y estudiantes. El régimen comienza a temblar, la vuelta al orden es su prioridad y tiene miedo que se conquista la unidad desde las bases.
De acuerdo a dirigentes del gremio docente, el alcalde se jugó no solo a desprestigiar el movimiento, sino que dijo que se acabarían las alimentaciones a estudiantes, buscando la división de las comunidades escolares.
Liderazgos sociales de la zona numeraron los problemas feroces que sufre la educación pública en la región: la alimentación; las filas enormes buscando matrícula; la falta de profesionales, de docentes, psicólogos y apoyos hacia la comunidad. Los enormes problemas de salud mental, la falta de espacios de recreación; la infraestructura decadente en la que estudian miles.
Durante una reunión, Silvana, apoderada, contó que llevan semanas haciendo fila en la CMDS para obtener matrícula, se levantan a la las 3 de la mañana para poder obtener un número de atención, y opinó que la alerta que aula segura no tiene nada de seguro: es para dejar en la calle a los niños que más necesitan. Radomiro, apoderado de una escuela del norte, narró que su hijo le mostraba el pan que le entregaban en la escuela y sólo tenía jugo de tomate; Ana testimonió sobre la sobrepoblación en las salas, una sobrecarga para los profesores que tienen que ver a 40 niños en salas pequeñas.
Hoy no será un día normal en Antofagasta. Sobran los motivos.