Entrevista con Gonzalo Durán, investigador de la Fundación SOL
«Que el Imacec (Índice Mensual de Actividad Económica) de marzo sea de 2,1 por ciento, la mayor contracción desde noviembre de 2022 sería, por un lado, un indicador de que entramos en recesión técnica y por otro, que la política monetaria con elevadas tasas de interés no han tenido el efecto que se esperaba.»
Para el economista de la Universidad de Chile e investigador de la Fundación SOl, Gonzalo Durán, hay dos aspectos que son muy relevantes a considerar. Por una parte, la situación internacional que ha golpeado la recuperación de China y que afecta a los socios comerciales, como nuestro país y las exportaciones del cobre y, por otro lado, la economía de los hogares que cada vez se “hace más evidente que el consumo ya no se sostiene con los actuales salarios”.
Asimismo, indicó que hay otros elementos que son parte de este escenario, como por ejemplo la discusión de la Reforma Tributaria y las “llamadas profecías autocumplidas” y cómo ciertos grupos empresariales promueven conductas que “generan esta profecía que el país se va a detener por el alza de los impuestos y termina haciéndose efectiva, porque son medidas de presión que detienen los procesos de inversión”.
Respecto de los salarios, el investigador recordó las cifras de deuda morosa dada a conocer por la Universidad San Sebastián que advirtió que el país registró la mayor alza de nuevos morosos en un año, con 4,1 millones de personas con deudas impagas.
“Eso nos hace reflexionar sobre el rol de los salarios en la economía y cómo las remuneraciones bajas hacen que sea muy difícil que la economía se pueda recuperar y tener el ritmo de crecimiento que tenía en el pasado. Eso no va a cambiar sino ponemos al trabajo en el centro del debate, lo que significa que los salarios ya no solamente sean determinados en una negociación individual, sino que sean conformados a través de la negociación colectiva”, manifestó el académico.
Por otro lado, Durán explicó que este bajo Imacec también “es una evaluación de la política monetaria y fiscal que lleva el país. Es una pésima nota en cuanto a lo que está sucediendo con el BC y demuestra que la Política Monetaria persiste con una inflación que está sobre los dos dígitos y la economía sigue en un proceso de estancamiento y de disminución del producto. Podríamos decir que estamos en una fase de estanflación, que es un estancamiento más inflación”.
Igualmente, el investigador planteó que el Banco Central no ha podido revertir esta situación con “tasas de interés excesivamente elevadas, una política monetaria muy agresiva y no ha dado con los resultados esperados”.
Por otro lado, sobre las proyecciones a partir de las cifras del ente emisor, Durán precisó que hay que sopesar el escenario internacional, convulsionado con la caída de algunos bancos en Estados Unidos, lo que “todavía produce inestabilidad en los mercados y va a generar que las cifras no sean muy positivas en los próximos meses”.
Además, el economista enfatizó que las cifras del desempleo para los meses de invierno van a aumentar, a lo que sumarán “el aumento de los gastos en calefacción y por lo tanto, uno esperaría mayores niveles de estrechez financiera en los hogares”.
Durán añadió que cada vez que se conocen cifras como las del Imacec, los empresarios y sus representantes dicen que no es tiempo de aumentar los salarios mínimos, hacer reforma de pensiones o negociaciones colectivas y “entramos en un círculo donde nunca es el momento. El problema con este razonamiento, es que la crisis estructural que estamos viviendo, es una crisis que está determinada por la situación que tienen los trabajadores y la situación de bajos salarios y por tanto, la manera de superar esta situación o enfrentar esta crisis es precisamente generando un mayor poder de negociación por parte de las y los trabajadores”.