El 3 de mayo de 2007 fue asesinado el obrero forestal Rodrigo Cisternas por Carabineros, en plena manifestación por mejoras laborales en las afueras de la planta de Celulosa Horcones. Son 15 años de total impunidad de este crimen tanto para los asesinos materiales como los responsables políticos y la propia empresa liderada por el Grupo Angelini, quienes continúan lucrando mediante la explotación social y ambiental en la zona.
En mayo de 2007 alrededor de 3 mil trabajadores forestales subcontratados salieron a las calles para manifestarse por mejores condiciones laborales. Sus demandas apuntaban a un aumento de 40 mil pesos con respecto al sueldo base de la época.
Los subcontratados buscaban tener las mismas condiciones laborales que los contratados, pues realizan el mismo trabajo, pero con menores salarios y beneficios laborales.
El 3 de mayo, una provocación de Fuerzas Especiales de Carabineros con insultos a los obreros forestales caldeó los ánimos y varios obreros forestales que habían estacionado sus vehículos en el cercano servicentro COPEC -otra empresa de los Angelini- junto a la planta Horcones pronto sufrirían la embestida policial.
Cerca de 15 minutos duró el corte de ruta y sin aviso previo, la policía militarizada reprimió por el norte y por el sur de la ruta 160 con gases lacrimógenos, carro lanza-aguas y perdigones. Se sucedieron duros enfrentamientos y la mayor parte de los trabajadores se refugiaron en las plantaciones forestales junto a la ruta, pero cuando un grupo se replegó hacia el Servicentro fue bestialmente castigado por los uniformados.
Los obreros descubrieron a Carabineros provocando destrozos en los vehículos de los trabajadores. Rodrigo Cisternas, para defender a sus compañeros de la brutalidad policial y hacer frente a los vehículos blindados, tomó un cargador frontal para embestir contra los carros blindados de la policía militarizada, y allí mismo lo asesinaron a balazos. La munición que finalmente lo mató, atravesó su cráneo por atrás. Las ráfagas de subametralladora UZI que ultimaron a Cisternas también dejaron heridos a 5 de sus compañeros.
La versión de Carabineros aseguró que ametrallaron al obrero como medida desesperada, por ver en riesgo su integridad física. La versión fue contrariada por personal del Servicentro, los que señalaron haber escuchado por las radios de Carabineros la orden de disparar, es decir, no habría sido una medida desesperada, sino una orden, una medida racional, pensada. Algo que por supuesto no consideró la justicia militar.
Entre el grupo de carabineros asesinos se encontraba el Sargento Primero del GOPE Luis Mellado Jaque, quien jamás ha recibido condena por el crimen.
Mientras tanto, el responsable político de este brutal asesinato fue Felipe Harboe, entonces Subsecretario del Interior del primer gobierno de Michelle Bachelet. Posteriormente, Harboe fue senador por Circunscripción 13 Biobío Cordillera, recibiendo un sueldo superior a 9 millones de pesos (más de 10.500 dólares mensuales). Actualmente es Convencional Constitucional.
Rodrigo dejó viuda a su esposa y huérfano a su hijo de 6 años en ese entonces. El 21 de abril del año pasado su madre falleció esperando infructuosamente justicia ante el asesinato de su hijo.

Rodrigo Cisternas Fernández